
Una batalla judicial clave por la privacidad digital acaba de hacerse pública: el Investigatory Powers Tribunal británico ha rechazado la solicitud del Gobierno del Reino Unido para mantener en secreto su litigio contra Apple.
El Ministerio del Interior británico pretendía que Apple creara un “backdoor” para su sistema de Advanced Data Protection (ADP), alegando poderes bajo la Investigatory Powers Act.
Apple se negó. ¿La razón? No puede ni quiere romper su cifrado. Solo el usuario puede acceder a sus datos. La empresa retiró ADP del Reino Unido en febrero y en marzo inició un procedimiento judicial.
La posición de Apple es firme:
“Nunca hemos creado una puerta trasera ni una llave maestra para ninguno de nuestros productos o servicios, y nunca lo haremos.”
El tribunal ha sentenciado que ocultar incluso los “detalles mínimos del caso” sería un ataque al principio de justicia abierta.
La decisión ha sido aplaudida por organizaciones como Open Rights Group, Big Brother Watch o Index on Censorship, que advierten del impacto global:
“Esto es más grande que Apple y el Reino Unido. Está en juego la privacidad de millones de personas.”
¿Qué está en juego?
• La posibilidad de que gobiernos democráticos exijan acceso sistemático a datos cifrados
• La independencia tecnológica de los proveedores frente al intervencionismo estatal
• El equilibrio entre seguridad nacional y derechos fundamentales
La transparencia en este caso no es solo una cuestión procesal, sino una defensa del modelo europeo de privacidad.
En esta resolución, los jueces Lord Justice Singh y Mr Justice Johnson rechazaron la solicitud del Ministerio del Interior británico de mantener en secreto los detalles básicos del caso, como la identidad de las partes involucradas y la existencia misma del proceso. El tribunal subrayó la importancia del principio de justicia abierta (open justice) y concluyó que revelar estos detalles no perjudicaría la seguridad nacional ni el interés público.
El caso se centra en la impugnación por parte de Apple de una Technical Capability Notice (TCN) emitida bajo la Investigatory Powers Act 2016, que supuestamente requería que Apple proporcionara acceso a su sistema de Advanced Data Protection (ADP), un servicio de cifrado de extremo a extremo para datos almacenados en iCloud. Apple se negó a crear una “puerta trasera” en su sistema, argumentando que comprometería la seguridad de todos sus usuarios, y en febrero de 2025 retiró el servicio ADP del Reino Unido.
La sentencia completa se puede consultar aqui y aqui.
#Privacidad #Apple #Cifrado #InvestigatoryPowersAct #DerechosDigitales #Tecnología #LegalTech #OpenJustice #QubitCyberDefence